La Osa

Desde LA OSA, decidimos escribir este artículo como una memoria para compartir una estrategia puntual que está teniendo éxito para abordar una situación concreta, siempre con la mirada hacía facilitar la creación y la consolidación de más cooperativas de usuarios y usuarias fuertes y autónomas.

A mitad del año 2022, un grupo de cooperativistas compartió su preocupación por fortalecer la estructura financiera de la cooperativa en uno de los encuentros estratégicos que se organizan anualmente. Al principio del año 2023, se forma un grupo de trabajo para abordar una posible tensión de tesorería prevista a principios del año 2024. Este grupo de trabajo se compone por miembros del Consejo Rector, personas socias de trabajo y cooperativistas de consumo, que presentan una primera propuesta y consiguen el respaldo del Consejo rector de la cooperativa. Los objetivos son analizar de forma más precisa la situación financiera de la cooperativa y elaborar una estrategia para afrontar un problema futuro de liquidez derivado de la inversión inicial y de un importante endeudamiento bancario de la cooperativa.

En los años anteriores, la cooperativa ya había hecho importantes esfuerzos de reducción de costes fijos (personal, alquiler, energía..) logrando alcanzar la viabilidad operativa del proyecto. Esta estrategia permitió  a la cooperativa cerrar en su segundo año de apertura con unos 25.000€ de beneficios antes impuestos. Sin embargo, estos beneficios no eran suficientes para asumir el servicio de la deuda (principal e intereses). Es decir que antes de atajar una problemática pura de tesorería, se trabajó en profundidad la viabilidad económica del proyecto.

Es importante recordar que la apertura de nuestro supermercado cooperativo fue posible, en primer lugar, gracias a la confianza otorgada por Coop57, Triodos Bank y Fiare Banca Ética al grupo promotor. Sin embargo, el análisis llevado a cabo por el grupo evidenció el importante peso de la devolución del préstamo contratado al inicio del proyecto (reforma del local, maquinaria, mobiliario, sistema de gestión…). Por primera vez, estos tres agentes de las finanzas éticas cofinanciaron un proyecto de la economía social y solidaria a partes iguales por un importe de 1 millón de euros. En 2023, el reembolso de esta deuda supone una salida de tesorería de unos 13,000€ mensual. Y se prevé un incremento de dicho pago debido a la subida  de los tipos de interés en el mercado global. En este punto de la historia de la cooperativa, estaba claro que se debía elaborar una estrategia para reducir este pago y permitir a la cooperativa crecer de forma más orgánica.

El grupo de trabajo realizó varias consultas a entidades de la economía social y solidaria. En este sentido fue clave el asesoramiento de otras cooperativas con más experiencia en financiación como Coop57, Ecooo y Aquo. En todo momento, se mantiene informado a las entidades financieras de sus avances para construir una estrategia compartida.

El análisis llevado a cabo dejó claro que las cooperativas suelen tener mayor dificultad de acceso a financiación debido a su forma jurídica basada en una gobernanza compartida que no otorga más poder ni consecución de plusvalías a quién invierte en la empresa. Este hecho dificulta la atracción de fondos para la creación y la consolidación de cooperativas, en particular las que son sin ánimo de lucro. En el proceso, se descubre el funcionamiento de los títulos participativos, herramienta específica para la capitalización de las cooperativas. Esta herramienta, a caballo entre los fondos propios y la deuda, permite la inversión no exclusivamente por parte de cooperativistas, sino por parte de otras personas y entidades próximas a La Osa.

Por lo tanto, se decide someter a aprobación de la asamblea general la emisión de títulos participativos por un importe entre 200.000€ y 300.000€.

Se opta por un importe mínimo de 200.000€ por dos motivos: una cifra suficientemente alta para reducir de forma consistente la tensión de tesorería de forma duradera y una cifra dimensionada a nuestra capacidad de captación dentro de nuestros círculos de afinidad. Por otro lado, diseñamos las condiciones generales de la emisión para tener un número alto de suscriptores y que la financiación de la cooperativa se haga de la forma más capilar posible. Los títulos se emiten a tres años, se remuneran con un 2% de intereses anuales, tiene un valor nominal unitario de 500€ y se limita la adquisición a 10 títulos por persona (5.000€) con el objetivo de conseguir el máximo número posible de titulares sin soportar muchos gastos administrativos.

Desde el principio se especificó que los fondos captados por la emisión se dedicaría en gran parte a amortizar de forma anticipada parte de la deuda contratada con las entidades financieras para reducir las cuotas de la deuda; otra parte se destinará a sostener  la operativa del supermercado a corto plazo. Al proceder a la amortización anticipada de la deuda, reducimos el riesgo que tienen las entidades financieras dentro del proyecto. Nos permite llegar a un acuerdo con las entidades financieras, de ampliación del plazo de devolución, reduciendo por este lado también las salidas de caja.

Una vez aprobado por la asamblea, se realizan los trámites administrativos y jurídicos necesarios y se empieza una campaña de difusión de la emisión principalmente dentro de nuestra base social. La clave del éxito de la campaña ha sido el largo proceso de deliberación del grupo promotor que permitió definir una estrategia con la cual nos sentimos suficientemente seguras y cómodas para resolver todas las dudas. Como buenas prácticas queda destacar: la realización de una asamblea dedicada a este asunto; la organización una fiesta de lanzamiento; la puesta en marcha de una mesa de información atendida todos los días por el grupo promotor dentro del supermercado; además de la comunicación digital en las redes internas y externas del supermercado.

Cabe agradecer en particular a todas las personas del grupo promotor; A todas las personas que han apoyado en la realización de la campaña; A las más de 210 personas y entidades que han adquirido títulos; Y a todas las personas que se comprometen día tras día con LA OSA para construir un nuevo sistema alimentario más transparente, justo, sano y cooperativista, y seguir soñando grande!

Al final de la campaña, se han alcanzado los 300.000€ de importe máximo de la emisión.

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